Me parece adecuado señalar que la escuela no estaba preparada para afrontar la pandemia COVID-19 en términos educativos. Las razones que esbozo, me llevan a pensar que la organización burocrática existente, en tiempos de “normalidad”, no sabe hacerlo en épocas de crisis, porque sus mecanismos están sostenidos por las relaciones jerárquicas, competitivas y meritocráticas, que en buena medida aún privilegian el encuentro y control personal. La dinámica de la escuela, históricamente centrada en el cumplimiento del curriculum y la didáctica aúlica, lejana y temerosa de las posibilidades educativas virtuales, en línea o a distancia, no es suficiente para responder a las necesidades formativas de la vida cotidiana, que hoy se desarrolla también en la virtualidad y a distancia.
Como lo expresa De Sousa (2020, p. 74) “las pandemias muestran de forma cruel cómo el capitalismo neoliberal incapacitó al Estado para responder a las emergencias”, dicho en clave educativa, el COVID-19 pone en evidencia a una escuela “normal” incapaz de responder a las emergencias, porque confunde la educación con la escolaridad, promueve la competencia y el individualismo; además de crear condiciones de infraestructura ideológica que soportan los ideales capitalistas que reducen el ser con el tener, analfabeta en términos digitales. Esta arquitectura formativa escolar, pasa hoy por un sismo que la ha dañado significativamente. Lo anterior, puede resultar bueno, porque su reconstrucción obligará a pensar en otras formas, más articuladas con el interés colectivo, para reconstruir a la escuela, al Sistema Educativo y al Estado mismo, en una nueva moralidad colectiva que se mostrará tanto en el nivel nacional, como en el internacional. La crisis demuestra la urgencia de acercar a la escuela con los procesos vitales y sociales de las personas.
Me parece que tanto autoridades, como profesores, padres de familia y alumnos, han descubierto la posibilidad de relacionarse en otra forma, que las redes sociales y el uso de internet son una posibilidad para educar desde lo cotidiano y considerado la poca pertinencia de las decisiones autoritarias jerárquicas con la realidad, de su poca eficiencia para atender los problemas en momentos de crisis inusitadas. El mecanismo de control burocrático, antes incuestionable y avasallador, que no se podía pasar por alto, hoy queda relegado por la posibilidad organizativa en el autoconfinamiento de los colectivos docentes, esto resulta ser un paso enorme hacia la añorada autogestión del centro educativo y, en el camino hacia una atención más pertinente a los problemas sociales. Las autoridades deben aprender a escuchar a las comunidades escolares, estar cercanos a las mismas, incluso, considerarse parte de ellas.
Hoy las prácticas docentes se despliegan para adaptarse a una situación inesperada, pero presente, no sólo en la escuela, sino en la vida diaria. Los profesores, a la vez que tratan de atender las necesidades formativas de sus alumnos en confinamiento, también se encuentran dentro de este, lo que otorga un cariz empático al proceso formativo. El propio de Sousa (2020) refiere cierto beneficio social de esta crisis al expresar: “sabemos que la pandemia no es ciega y tiene objetivos privilegiados, pero aun así crea una conciencia de comunión planetaria, de alguna manera democrática” (p. 23). A esto lo considero una especie de koinonía social, desde una ética del apoyo mutuo y la responsabilidad colectiva.
Docentes, padres de familia y estudiantes son, en cierta manera, compañeros del mismo dolor. Sería deseable que esta situación se traduzca en formación solidaria, donde la realidad sirva para educar a los estudiantes, recuperarla en la construcción de aprendizajes sólidos sobre la responsabilidad colectiva, el amor a la naturaleza y al género humano. Sentar las bases de una nueva moral colectiva, sustentada en la consciencia de que todos estamos en el mismo planeta y, por tanto somos corresponsables de cuidarlo, las pandemias se incorporan a la vida cotidiana, por tanto tenemos que aprender a superarlas de la mejor forma posible. Valorar la vida humana en toda su amplitud y no sólo en términos de posesiones o apariencia; sobre todo en una época donde existe la posibilidad de su extinción; por tanto, es necesario protegerla, reforzarla y reconstruirla, esto no puede ser una labor individual, es una tarea colectiva, necesaria e insoslayable, incluso de supervivencia del género humano. Me parece que el curriculum actual se queda corto para lograr esto, por tanto habrá que actualizarlo. La educación no puede ser más una formación en competencias tecnocientíficas; sino avanzar hacía la conformación de buenos y solidarios seres humanos.

Referencias.

De Sousa, B. (2020). La cruel pedagogía del virus. Argentina: CLACSO.

Gobierno de la Ciudad de México (2020). Hospitales COVID-19. Disponible en: https://datos.cdmx.gob.mx/explore/dataset/hospitales-COVID-19/table/
Gobierno de México (2020). Nueva normalidad priorizará salud y bienestar de la población; presentan estrategia de reinicio de actividades. Disponible en: https://presidente.gob.mx/nueva-normalidad-priorizara-salud-y-biene...
Gobierno de México (13 de mayo de 2020). Estrategia para Nueva Normalidad; semáforo de reinicio de actividades. Conferencia presidente AMLO. Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=BMMEzfuQU1s
Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) (17 de febrero de 2020). Comunicado de prensa. Disponible en: http://www.ift.org.mx/sites/default/files/comunicacion-y-medios/com...
Primero, L. (2020). Repensar la vida cotidiana en tiempos del COVID-19. En Reflexiones marginales. Número especial 8: Coronavirus. México: UNAM. Disponible en: https://revista.reflexionesmarginales.com/repensar-la-vida-cotidian...
Secretaría de Salud del Gobierno de México (2020). Lineamiento general para la mitigación y prevención de COVID-19 en espacios públicos abiertos. México: SSGB.
Secretaría de Educación Pública (SEP) (2020). Aprende en casa. Manual de recomendaciones para estudiantes. Disponible en: https://www.aprendeencasa.mx/assets/archivos/manual_recomendaciones...
Secretaria de Educación Pública (SEP)/Google for Education. (2020). Estrategia de Educación a Distancia. Transformación e innovación para México. Disponible en: https://events.withgoogle.com/educacion-a-distancia/