Víctor Nieto Bonilla
  • Hombre
  • Lima
  • Perú
Compartir en Facebook MySpace
  • Blog Posts
  • Discusiones
  • Eventos
  • Grupos
  • Fotos
  • Álbumes de fotos
  • Vídeos

Las amistades de Víctor Nieto Bonilla

  • Horacio Mendez

Regalos recibidos

Regalo

Víctor Nieto Bonilla aún no ha recibido ningún regalo

Enviar un regalo

 

Página de Víctor Nieto Bonilla

Información de perfil

Ciudad y País
Lima-Perú
Título y especialidad
Licenciado- Historia
Grado Académico
Licenciado y Magister
Institución a la que pertenece
Consultores Sociales
Intereses académicos
Intercambios, publicaciones , contribuciones ,debates ponencia, eventos

REFLEXIONES ACERCA DE LAS UNIVERSIDADES DE AMERICA LATINA

Por Víctor Nieto Bonilla
Historiador

Salvo excepciones, la universidad latinoamericana es aún
premoderna. El mérito académico no genera preeminencia, las decisiones fundamentales no son académicas sino administrativas y la preocupación por los problemas de infraestructura se centra en la infraestructura física por encima de las de comunicaciones y la virtualidad. En gran medida, la universidad refleja el comportamiento de una sociedad poco democrática, en donde el mérito apenas cuenta; los nombramientos y cargos, cuando no la riqueza, definen la posición; los edificios y monumentos -y no el conocimiento- representan la huella social.

En ese contexto, la universidad latinoamericana se orienta en general a la docencia, que no siempre es de buena calidad, es poco competitiva en el plano internacional y se imparte parceladamente a un número limitado de estudiantes. La investigación es insuficiente o incluso inexistente. Como consecuencia de ello, la universidad básicamente ofrece a la sociedad, profesionales no siempre bien preparados y no siempre adecuados a sus necesidades. Es necesario superar esa situación. Es tiempo de transformar la universidad latinoamericana y modernizarla para que contribuya al bienestar de la sociedad. De otro modo, la educación superior no podrá cumplir su rol fundamental: crear capital humano, adelantarse y funcionar como guía,ofrecer reflexión y soluciones.La universidad es, básicamente, una comunidad de profesores y estudiantes orientada a la producción y la gestión del conocimiento. Por ello, parece evidente que esa comunidad se constituya en un centro de docencia y de investigación. Algunos añadirían a esas funciones el servicio. Es posible, pero ello se desprende de las dos funciones anteriores; es decir, la universidad debe servir a la sociedad enseñando lo que sabe y desarrollando nuevos conocimientos.

¿Qué debe pesar más, la docencia o la investigación?. Es claro que las universidades que no puedan dedicarse a la investigación en profundidad, por escasez de recursos o por preferencia, deberían centrarse en la docencia. Pero es absolutamente necesario, para cualquier país, contar con universidades que tengan la investigación como eje central. Estas funciones deben cumplirse a través de los profesores. El conocimiento no lo posee la universidad como institución abstracta ni tampoco sus autoridades, sino sus profesores, que son quienes lo desarrollan y difunden.

Esto implica el reconocimiento social del profesor. Ese reconocimiento no nace ni se otorga por mandato o nombramiento, es el resultado de un proceso alimentado por sus aportes a la sociedad y por un comportamiento ético, competitivo, flexible, exigente y tolerante. Ese proceso supone generar y proponer ideas, convocar y participar en foros y debates relevantes y oportunos, publicar en revistas reconocidas y leídas, y educar y preparar a los estudiantes como profesionales reconocidos.

La universidad latinoamericana debe contribuir a crear riqueza y a resolver la pobreza, la inequidad y la exclusión social. Por tal razón, la investigación y la docencia deberían concentrarse en estas cuestiones, que son al mismo tiempo éticas, económicas, políticas, sociales y tecnológicas.El objetivo debería consistir en diseñar soluciones eficaces y eficientes para tales desafíos y participar en su implementación. Al mismo tiempo, las investigaciones no concluyen con los resultados; deben difundirse a la sociedad. El conocimiento no socializado no es conocimiento; cuanto más conocido, más valorado. Esa difusión requiere debate, publicaciones, foros, conferencias. Para ello, cada profesor debe desarrollar, hasta donde sea posible, sus propios textos, y los profesores vinculados a una disciplina o un tema deben publicar una revista académica y realizar conferencias.

Ciertamente, esos desarrollos, teóricos y aplicados, deberían enfocarse a la solución de los problemas de la sociedad. En otras palabras, la universidad debe influir significativamente, constituirse en referencia principal y ser parte de los debates sociales y de la formulación de las políticas públicas y las nuevas reglas y normas que regirán a la sociedad. Esa es su obligación primordial.

Las cifras anteriores se ven reflejadas dramáticamente en los rankings internacionales sobre universidades. Según el THES-QS World University Rankings1, la mayor parte de las 400 universidades mejor calificadas en el mundo en el 2007 son estadounidenses (Harvard es la primera), junto con universidades europeas y asiáticas.

En el ranking solo aparecen siete universidades latinoamericanas: tres brasileñas, una mexicana, dos chilenas y una argentina. Las latinoamericanas mejor clasificadas son la Universidad de San Pablo (puesto 175), la Universidad de Campinas (177), la Universidad Nacional Autónoma de México (192), la Universidad Católica de Chile (239), la Universidad de Buenos Aires (264), la Universidad de Chile (312) y la Universidad Federal de Río de Janeiro (338).Como ha leído el lector podrá meditar sobre el drama de las universidades latinoamericanas salvo excepcionales, Brasil, Chile y Argentina, los restantes no figuran en la evaluación, que retrotrae a meditación y a realizar reingeniería mental de quienes son actores de la gestión de calidad académica y para la sociedad de enjuiciar el rol educativo que viene cumpliendo como paradigma de la formación de gestión pública y universitaria y diseñamiento de estrategias para trazar que modelo de sociedad debe reconstruir con sus egresados.

El desafío del siglo XXI no solo es globalización económica sino como asentamos el nivel de preparación académica como la proyección de los profesionales para trazar la reconstrucción de la sociedad peruana al igual que delinear el proyecto nacional.
Victor Nieto Bonilla
Historiador-Consultor social nacional e internacional

Comentario (1 comentario)

Necesitas ser un miembro de RedDOLAC - Red de Docentes de América Latina y del Caribe - para añadir comentarios!

Participar en RedDOLAC - Red de Docentes de América Latina y del Caribe -

A las 4:38pm del agosto 26, 2012, Horacio Mendez dijo...

Te invito a participar del foro sobre educación e imaginación

 
 
 

IFC-RedDOLAC

Campus Virtual RedDOLAC

Su Constancia RedDOLAC

Anuncie sus Congresos o servicios Educativos en RedDOLAC

Consúltenos al correo: direccion@reddolac.org

Contáctenos

Participe en la sostenibilidad de RedDOLAC

Canal de audio RedDOLAC

RedDOLAC

Organizaciones

Su constancia de RedDOLAC

Gracias por su visita

© 2024   Creado por Henry Chero-Valdivieso.   Tecnología de

Emblemas  |  Reportar un problema  |  Términos de servicio