Alto coeficiente no es felicidad: El síndrome "Sheldon Cooper"

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Cátedra Electrónica: Paraninfo de Manlio Soto

Alto Coeficiente no es felicidad: El Síndrome “Sheldon Cooper”
Parte I

Manlio Soto Paiz
Psicólogo y educador

Abstract y comentario de: ¿QUÉ ES ESO QUE LLAMAMOS INTELIGENCIA? Escrito por Dr.Fernando Horacio Lapalma, psicólogo argentino.*

Según el Dr. Fernando Horacio Lapalma, los primeros puntajes en notas de egreso no se correlacionaban con mayor éxito profesional. Es decir que la formula:

Mayor puntaje=mayo éxito profesional no se cumple. Igualmente entonces:

I.Q. más elevado = mayor éxito profesional, No siempre se cumple. Mucho menos:

I.Q. elevado= felicidad.

Esta siguiente ecuación es algo que SI se cumple generalmente:

I.Q elevado ≠ felicidad

Agrego las siguientes:

I.Q elevado ≠ Inteligencia emocional
I.Q elevado≠ Inteligencia Social.

Este estado de elevada capacidad intelectual, lógico-matemática, que no corresponde con la creatividad, empatía y la emoción, le he bautizado a manera lúdica el “Síndrome Sheldon Cooper”. Refiriéndome al personaje de la serie de comedia de situación “The Big Bang Theory”, vemos como éste joven posee un I.Q elevado, doctorado a temprana edad, un puesto importante en una Universidad pero carece de la capacidad de responder a situaciones sociales, interpersonales e intra-personales que son necesarias para el éxito en un entorno social. Es necesario notar que Sheldon Cooper lucha por entender a sus compañeros. Vemos que el personaje se esfuerza por encajar, de lo contrario estaría en el borde del autismo. Este referente es excelente ejemplo de las contradicciones de la educación tradicional y lo que considera “éxito” académico. A través del ensayo de Lapalma iré analizando brevemente desde la psicología analítica el contenido.

Expone Lapalma acerca de esta contradicción:

“Los evaluados con los promedios más altos tenían más puertas abiertas, sí. Pero no era garantía de que luego en el ejercicio de su conocimiento, realmente fueran los mejores. Observando a mis alumnos veía "malos" estudiantes que fuera del ámbito educacional eran brillantes, creativos, inteligentes”

La mecánica escolar de nuestro último siglo y sus predecesores no ha podido con ciertos alumnos que no muestran un desempeño alto. Les descartan como parias académicos aunque sean en realidad personas con un alto nivel de creatividad y desempeño en otras áreas:

“Niños entusiastas, con ideas y objetivos claros parecían perder la motivación al incorporarse a los procesos de enseñanza y de aprendizaje del colegio. No lograban engranar en esa mecánica propuesta por la escuela”

Sucede entonces la pedagogía negra, la educación traumática en la que se hace una asociación equivocada de aprender-dolor y por ende, un rechazo al estudio, según expone Lapalma.

La clave para resolver esta contradicción reside en que nuevos estudios han ampliado el espectro de lo que se considera “inteligencia”. La escuela tradicional mide y pide acumular puntos de manera lógico-matemática primordialmente. Sin embargo hay muchas otras dimensiones la inteligencia y eso lo demostró Howard Gardner y su teoría de las inteligencias múltiples:

“Hasta ahora hemos supuesto que la cognición humana era unitaria y que era
posible describir en forma adecuada a las personas como poseedoras de una
única y cuantificable inteligencia. Pues la buena noticia es que en realidad
tenemos por lo menos ocho inteligencias diferentes.(…) La mayoría de los individuos tenemos la totalidad de este espectro de inteligencias. Cada una desarrollada de modo y a un nivel particular, producto de la dotación biológica de cada uno, de su interacción con el entorno y de la cultura imperante en su momento histórico. Las combinamos y las usamos en diferentes grados, de manera personal y única.”

Prosigue Lapalma:

“Sin embargo, cuando analizamos los programas de enseñanza que impartimos, que obligamos a nuestros alumnos seguir, a nuestros hijos; vemos que se limitan a concentrarse en el predominio de las inteligencias lingüística y matemática dando mínima importancia a las otras posibilidades del conocimiento. Aquí el por qué muchos alumnos que no se destacan en el dominio de las inteligencias académicas tradicionales, no tienen reconocimiento y se diluye así su aporte al ámbito cultural y social. Y hasta pensamos de ellos que han fracasado, cuando en realidad estamos suprimiendo sus talentos.”

En un mundo tecnológico e intelectualmente hiperactivo, la lingüística y la matemática ha predominado como inteligencias que la cultura promueve. Últimamente con los avances de la informática y la ciencia estas cualidades han despuntado. Esto no quiere decir que sea la “realidad” en la praxis cotidiana y la supervivencia moderna, pero es lo que la cultura y la masa “aprecia” en los estudiantes. De modo que si no se ajustan al molde se predice su fracaso con frases como: “Esa carrera no tiene futuro”, “De eso te morirás de hambre”, “Estudia lo que está de moda”.

Vemos como el condicionamiento social y la cultura la da un tinte a la escolaridad:

“Hoy es la técnica. Así como ayer en época de Mozart, en una Europa en que florecían las artes en general, mecenas adinerados sostenían a los artistas reforzando la jerarquización y desarrollo de las que hoy conocemos y denominamos inteligencia musical e inteligencia espacial. De esta manera la cultura imperante favorece y valoriza a algunas inteligencias en detrimento de otras. Crecen así intelectos de parcial desarrollo que de otra manera podrían ser mucho más completos.”

La cultura, el consumismo y el “mass-media” son los condicionantes del aprendizaje. Los padres muchas veces como portavoces de las restricciones y filtros sociales, desde un punto de vista psicoanalítico representan “El Super-yo”, resultan ser los castigadores y promotores de la expresión espontánea del “yo” que maneja las irrupciones de las pulsiones inconscientes. Del “Super-yo” educativo, de su aprobación o condena depende el ego-de aprendizaje que es una parte de autoestima y de la valoración general del “Yo” o ego”. La escuela es parte del “super yo castrante”, hostil o represor. Esto lo he expuesto en un artículo anterior llamado el Aprendizaje mediado vers. El aprendizaje negro. Cito de dicho artículo:

“El aprendizaje “negro” o deconstructivo crea un una autoimagen negativa, un “ego-de aprendizaje” muy frágil. Esto conduce a la deserción académica, la baja estima a través de experiencias negativas de aprendizaje que estimula al individuo a construir una “teoría personal” de quién es y hasta dónde puede llegar.”(catedraelectronica.blogspot.com/)

Esto coincide con la visión de Lapalma sobre las experiencias cristalizantes y las experiencias paralizantes:

“Los niños viven pendientes del reconocimiento de los adultos. La expresión valorativa de las figuras parentales es dramáticamente poderosa en la mente
en formación del infante. Existen dos tipos de experiencias extremas que es importante tener en cuenta. Las experiencias cristalizantes y las paralizantes. Las primeras, son hitos en la historia personal, claves para el desarrollo del talento y de las habilidades en las personas. Se cuenta que cuando Albert Einstein tenía cuatro años su padre le mostró una brújula magnética. Ya en la adultez, el autor de la Teoría de la Relatividad, recordaba ese hecho como el motivador de su deseo imparable de desentrañar los misterios del universo. Por otro lado, como contrapartida, existen las experiencias paralizantes. Son aquellas que bloquean el desarrollo de una inteligencia. Podemos poner como ejemplo a un mal maestro que descalificó un trabajo, humillando con su comentario frente al aula la incipiente creación artística de un alumno. O la violenta evaluación de un padre cuando gritó "deja de hacer ese ruido" en el momento en que la fantasía del niño lo hacía integrar una "banda" importante en concierto y golpeaba con dos palillos sobre la mesa.”

La visión de un aprendizaje que regula el autoestima, que fortalece el “yo” o ego, desde un punto vista psicoanalítico, para realizar transacciones sanas entre el “super yo escolar” y sus propios deseos naturales; la expresión de su ser a través de lo que el “yo” puede incorporar del “ello”. La fuerzas que rigen la psique pueden verse desequilibradas en su dinámica en la escuela, siendo esta como un segundo hogar, o en la educación a cualquier nivel. De ello la importancia de este meta-análsis de la psique en la educación-aprendizaje. Deseamos valorar la unicidad de cada alumno y evitar el mecanismo represivo que el dogmatismo escolar muchas veces llena de emociones negativas:

“capaces de frenar el normal desarrollo de las inteligencias. Sensaciones de miedo, vergüenza, culpa, odio, impiden crecer intelectualmente. Es probable así que luego el niño decida no acercarse más a un instrumento musical o no dibujar más porque ya decidió que "no sabe hacerlo". La responsabilidad de las figuras parentales es enorme.”

Ni qué decir de la responsabilidad del docente. El docente es mediador de la salud mental del alumno. Un docente sin conciencia mediadora paraliza, acorta y limita el yo del alumno en el proceso de aprendizaje. Se produce entonces el aprendizaje “negro” o deconstructivo. Este hace que el sujeto crea en una teoría personal en la cual su “ego-de aprendizaje” es muy frágil, su estima y valía disminuyen.

Continúa Lapalma:

“Hay que tomar conciencia de ello y actuar en beneficio del niño. Los padres en casa, con estímulo, comprensión y aliento. Los docentes cambiando el enfoque del proceso de enseñanza y de aprendizaje. Aplicando el concepto de las inteligencias múltiples, desarrollando estrategias didácticas que consideren las diferentes posibilidades de adquisición del conocimiento que tiene el individuo. Si el niño no comprende a través de la inteligencia que elegimos para informarlo, considerar que existen por lo menos siete diferentes caminos más para intentarlo. También enriqueciendo los entornos de aula, promoviendo amplitud y posibilidades de interactuar de diversas formas con compañeros y objetos a elección del alumno.”

Lapalma propone un cambio en la currícula escolar tomando en cuenta las I.M. y la manera en que sea evalúa el desempeño escolar. Expone algunos de los resultados de su experiencia.

“Se abre así a partir de esta teoría de las I.M. una revolución en la enseñanza.
La teoría está. El conocimiento, de las diferentes inteligencias, al alcance de
los docentes, de los padres y de las autoridades responsables de la educación.
Sólo hace falta tomar el desafío y ponerlo en marcha.
La experiencia de más de diez años de aplicación de este enfoque teórico deja un corolario que puede resumirse en los siguientes logros:

• Minimización de los problemas de conducta
• Incremento de la autoestima en los niños
• Desarrollo de las habilidades de cooperación y liderazgo
• Enorme aumento del interés y de la dedicación al aprendizaje
• Incremento de hasta un cuarenta por ciento en el conocimiento
• Presencia permanente del humor

Tomando en cuenta el panorama de la contradicción entre I.Q versus éxito profesional e interpersonal y el filtro cultural dentro de los “valorado”: ¿Qué pasa entonces con el Síndrome Sheldon Cooper? Un genio/idiota con elevado I.Q. y escasas destrezas sociales y emocionales. Sigo abriendo la puerta al psicoanálisis y podemos entender que un “Genio/idiota” sería el hijo mimado del “super yo”. Un robot al mando de lo que ha introyectado o internalizado como “rigor intelectual”. Siendo un hijo mimado se infla su narcisismo y egocentrismo. La incapacidad de empatía y deficientes relaciones interpersonales es muestra de ser siempre un auto-referente cuando se trata de valorar lo que es correcto o incorrecto de manera intelectual, fría y lógica. No hay tonalidades grises para el genio idiota como Sheldon Cooper. Dentro de la comedia televisiva esto es algo cómico pero para personas que poseen tal estructura de carácter puede causarles problemas de adaptación y afectar su salud mental.
Deseamos un sistema educativo que produzca seres diversos, con diversas destrezas y competencias no interfieren con su valía personal. No deseamos crear robots en serie. Aunque muchos dogmas educativos y gubernamentales lo han deseado.

*El título original del presente artículo es "¿Qué es eso que llamamos Inteligencia?" con el subtítulo "La Teoría delas Inteligencias Múltiples y la Educación". Email: f_lapalma@sinectis.com.ar - Sitio web:www.lapalmaconsulting.com

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