Diremos que un tipo de cambio es de equilibrio si a ese precio se iguala la demanda de dólares con la oferta de dólares.
En los artículos anteriores probamos que existen tipos de cambio (precio del dólar en Lempiras) que generan equilibrios externos y son las remesas familiares y los nuevos préstamos externos los que facilitan dicho equilibrio y porque tales fuentes de divisa neutralizan los excesos de demanda de dólares. Sin embargo existen tipos de cambio que pueden dañar la economía y sociedad del Estado de Honduras. Y nos interesa saber ¿cuál de estos tipos de cambio genera el mejor equilibrio externo? que permita el mejor desarrollo de la economía nacional.

En base a dichos “tipos de cambio” presentamos modelos o relaciones entre la producción sectorial y las importaciones de bienes y de combustibles para que el gobierno visualice el futuro del corto plazo de la producción sectorial respecto a las importaciones sectoriales y de combustibles, y el gobierno tome decisiones optimas.

Los términos de intercambio (TI) es el cociente del Índice de Precio de las Exportaciones (IPX) entre el Índice de Precio de las Importaciones (IPM).
En el periodo 2000 al 2009 los términos de intercambio estuvieron decreciendo, esto es que el precio de las importaciones crecieron más rápidamente que el precio de las exportaciones causando distorsiones en la economía y sociedad del Estado y en el 2010 debido a la los efectos de la crisis internacional los términos de intercambio crecen en 3 por ciento por el mejoramiento de los precios de varios productos de exportación como el café, camarón cultivado, banano, langosta, productos mineros y otros.

Recordemos que en 1989 el tipo de cambio se situaba en 2 lempiras el dólar y a partir del gobierno del cambio 1990 el “tipo de cambio” por recomendaciones del FMI se sitúa en 4.38 Lempiras el dólar y la devaluación continuo hasta el 2005 que el dólar llega a costar en promedio 19 Lempiras por dólar. Todo ese tiempo de devaluación fue acumulando distorsiones generando desastres en la economía nacional como la perdida de la rentabilidad de los sectores agropecuario e industrial respecto al sector comercio y servicios, y de la perdida de la rentabilidad del sector agropecuario (sin materiales mineros) respecto al sector industrial y por la ley de baumol se genera un efecto migratorio de las areas rurales hacia las ciudades, provocando el aumento de la pobreza, la desintegración familiar, el aumento de la delincuencia con perdida en la seguridad ciudadana. A partir del 2006 al 2010 el tipo de cambio se sitúa 19.03 hasta mediados del 2011. A partir de julio del 2011 la política cambiaria del BCH sitúa el tipo de cambio en una banda de precios en que el Lempira tiene mayor probabilidad a la devaluación o que el tipo de cambio aumente. Así en julio y agosto del 2011 el tipo de cambio paso de 19 Lempiras por dólar a 19.03 y la moneda se devalúa y el tipo de cambio llega a 19.06 Lempiras por un dólar según estadísticas del BCH. Las devaluaciones encarecen las importaciones y abaratan las exportaciones y los familiares de nuestros compatriotas por remesas reciben menos lempiras por un dólar. Las devaluaciones aumentan el exceso de demanda de dólares que podría motivar futuras devaluaciones si no se mejoran los tratados migratorios y si los nuevos préstamos externos se restringen. Los aumentos del tipo de cambio o las devaluaciones del 2011 van a influir en los términos de intercambio. Recordemos que el encarecimiento de las importaciones no reduce el volumen importado porque las importaciones son insumos de la producción sin sustitutos en este momento, y el aumento de los gastos de dólares en importaciones son inevitables para el crecimiento de la economía, generándose un mayor endeudamiento externo inevitable.
El Lector puede consultar el articulo el teorema de Prebisch Uribe Llopis en la solución del problema del Presidente, y equilibrio de Nash ya publicados por Diario Tiempo en estos espacios del editorial y de martes financiero, solo falta comentar en teorema de Prebisch y el tipo de cambio de equilibrio mediante aplicaciones de la teoría de juegos.

Por Jose Salomon Perdomo Mejia, Rector del IICES (Instituto de Investigacion Cientifica y Educacion Superior) Rector del CIMES (Centro de Investigaciones Matematicas Economicas y Sociales)

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